Mirar suelo hacia otro lado
cuando me siento muy sola.
Y me escondo en el abrazo
cómodo y gris de mi alcoba.
«¿Qué me dices? ¡Sal de ello!
Nunca debes olvidar
que a tu lado luchan otros.
No concedas realidad
al engaño de tus ojos.
¿Se siente solo aquel faro
que da luz al amplio mar?
¿Se siente sola una espada
en poder del capitán?
¡Adelante! ¡A campo abierto!
¡Todos a una! ¡A la par!».