Con motivo del I , la Escuela del Deporte con Corazón, en colaboración con la Real Academia Olímpica Española, está organizando e impartiendo por toda España conferencias sobre este pedagogo, filósofo y amante de la historia junto con una exposición que consta de varios paneles con información tanto gráfica como descriptiva sobre la vida y obra del barón Pierre de Coubertin.
Además, en este ciclo se proyecta un audiovisual cedido por la RAOE titulado «Pierre de Coubertin, ayer y hoy», en donde podemos escuchar la voz del presidente y fundador de la Academia Olímpica Española, D. Conrado Durántez.
Si queremos destacar algo de este maravilloso ser humano es que Pierre de Coubertin estaba convencido de que la restauración de los Juegos Olímpicos, tras siglos de olvido, ayudaría a desarrollar mejores individuos, lo que llevaría a un mundo mejor y, por tanto, a la paz; quería demostrar que la humanidad podía ser pacíficamente competitiva. Por eso, durante los Juegos de Londres dijo esta frase tan conocida y con un importante significado: «Lo importante de los Juegos Olímpicos no es ganar sino participar, de la misma forma que lo más importante en la vida no es el triunfo, sino el esfuerzo. Lo esencial no es haber conquistado, sino haber luchado bien».
Pierre de Coubertin estaba convencido de que la restauración de los Juegos Olímpicos, llevaría a un mundo mejor y, por tanto, a la paz; quería demostrar que la humanidad podía ser pacíficamente competitiva
Dentro de su ideario, Pierre de Coubertin entendía el espíritu de lucha como una constancia vital: «La vida es bella porque la lucha es bella: no la lucha sangrienta, fruto de la tiranía y de las malas pasiones, las que fomentan la ignorancia y la rutina, sino la santa lucha de las almas, en busca de la verdad, la luz y la justicia» (1902).
En sus Memorias olímpicas, Coubertin expresa con claridad su postura: «El deporte no es ningún objeto de lujo ni una actividad para ociosos, ni es siquiera una compensación muscular al trabajo cerebral. Es, por el contrario, para toda persona, una fuente eventual de perfeccionamiento interior, no condicionada por la condición laboral, patrimonio de todos por igual y cuya esencia no puede sustituirse con nada».
La Escuela del Deporte con Corazón es consciente de lo que se transmite a través de la práctica del deporte y promueve la vivencia de la actividad deportiva con «espíritu olímpico». Invitamos a todos aquellos que viven de esta manera el deporte a participar de las próximas conferencias que se realizarán en Barcelona, Almería y Jaén.