Arte — 1 de enero de 2025 at 00:00

Supersubmarina

por
Supersubmarina
Fuente: https://crazyminds.es/artistas/supersubmarina/

José (Chino), Pope, Jaime y Juancar son un grupo de amigos de Baeza que en 2005 deciden formar una banda. En pocos años, la calidad de su música y sus letras, que abarcan las relaciones personales y los problemas cotidianos, los aúpan a lo más alto del panorama indie rock español. En pocos años son cabeza de cartel en festivales y llenan las salas de concierto. Están en lo más alto y el futuro es prometedor.

Un fatídico 14 de agosto de 2016 sus vidas dieron un vuelco. De regreso a Baeza tras un concierto en Cullera sufren un terrible accidente de tráfico en el que salvan la vida, pero trunca su carrera musical. El resultado del accidente les deja amplias secuelas tanto físicas como psicológicas.

Juancar (batería) fue el último en abandonar la UCI después de cuarenta y siete días. El guitarrista Jaime pasó por numerosas operaciones para tratar de salvar su rodilla y sufrió una grave depresión que le hizo pensar en quitarse la vida. Pope (bajista) conducía la furgoneta y fue el primero en abandonar el hospital; sin embargo, el complejo de culpa le sigue acompañando: «Tenía siempre en la cabeza que yo era el que conducía».

José sufrió un traumatismo craneoencefálico y pasó treinta y un días en coma inducido en la UCI. Las secuelas del trauma siguen presentes en el día a día de Chino. Sufre de anosognosia, la incapacidad de introspección para percibir y reconocer una enfermedad que uno mismo padece. Incluso tuvo que aprender de nuevo a hablar o caminar. Otra de las secuelas afectó a su memoria y Chino no recuerda sus años como perteneciente a la banda Supersubmarina. En realidad, no recuerda nada de los ocho años anteriores al accidente: «Yo no sé lo que es subirme al escenario ahora mismo. He visto vídeos, pero no recuerdo lo que es estar exactamente ahí».

Precisamente el regreso de la banda recae en la recuperación del Chino, el alma de Supersubmarina, compositor y voz. Aunque todavía no es capaz de tocar la guitarra y sus secuelas neurológicas siguen incapacitándole, él no se rinde. Sueña cada día con volver a tocar la guitarra y subirse al escenario. Con una sonrisa que no le abandona, no tiene dudas sobre su recuperación y el reencuentro con la banda.

La capacidad de sobreponerse a los duros golpes de la vida es una actitud característica de la filosofía. Difícilmente encontraremos algún filósofo que haya tenido una vida fácil.

La filosofía ante las dificultades

Boecio fue un filósofo y poeta romano que vivió durante los siglos V y VI. Estudió retórica y filosofía en Atenas y Alejandría. Tuvo grandes influencias del neoplatónico Amonio; gran conocedor del griego antiguo, tradujo al latín algunas obras de Platón y Aristóteles.

Tuvo un final trágico por disputas políticas y murió decapitado por orden de Teodorico el Grande. Su obra cumbre es De la consolación por la filosofía. Está escrita en forma alegórica, en donde la Filosofía es algo así como una dama ideal, perfecta, que a través de sus argumentos consuela a Boecio en sus momentos amargos. La filosofía asume aquí el papel que en los antiguos gnósticos tenía Sophía: un arquetipo, una dama, la Inteligencia o Luz Divina que es capaz de consolar al filósofo y reconfortarlo en sus dudas.

«La filosofía es el amor a la sabiduría, que es aquel pensamiento vivo, causa de todas las cosas, que subsiste en sí mismo y solo necesita de sí mismo para subsistir. Al iluminar el pensamiento del hombre, la sabiduría lo ilumina y lo atrae hacia sí por el amor».

Boecio, encerrado en su celda se lamenta de sus males y echa la culpa a su mala fortuna. No puede evitar lamentarse y recordar los buenos momentos anteriores a su cautiverio. La dama Filosofía le enseña que lo que llamamos fortuna es más bien una calamidad que sacude el corazón de los seres humanos. La fortuna adopta todo tipo de disfraces, engañando a los humanos y produciéndoles un gran dolor cuando desaparece bruscamente.

En palabras de Boecio, la filosofía le enseña: «nada precioso te ha dado la fortuna ni nada importante has perdido por su causa».

Todos, seamos o no filósofos a lo largo de nuestra vida, pasamos por diferentes momentos difíciles. Es como si la vida nos estuviera probando. Es posible que así sea…

A veces, en nuestra ignorancia, creemos que el tiempo lo cura todo. La filosofía de la acción nos dice que, si retrasamos el momento de enfrentarnos a las dificultades, es peor. Sabemos que tenemos que hacer algo para enfrentar nuestras pruebas, pero si no las enfrentamos, estamos fracasando. Aparece el miedo al fracaso. Desde el punto de vista filosófico, el fracaso es no actuar, no atreverse a enfrentar nuestros miedos.

Otra reacción no demasiado filosófica es creer que las dificultades de la vida son injusticias del destino: ¿por qué a mí?, ¿qué he hecho yo para merecer está desgracia? No quiero profundizar en diferentes enseñanzas acerca del karma que nos dirían que aquello que nos pasa lo hemos generado nosotros mismos con nuestras acciones.

Lo importante y lo que todo el mundo busca ante cualquier prueba es poder superarla. Y para superarla debemos usar el valor y enfrentarla. Lo más importante es dar el primer paso, abandonar la autocompasión y salir de nuestra zona de confort lo antes posible. Y si no encontramos soluciones, podemos pedir ayuda. Podemos buscar los consejos de los grandes filósofos y aplicarlos. De nada vale conocer las diferentes teorías y enseñanzas filosóficas si no somos capaces de llevarlas a la práctica.

Sigue diciendo Boecio que las personas solo son dueñas del fruto de su propio esfuerzo. La Filosofía le muestra a Boecio que bienes, riquezas y honores pueden ser otorgados y desaparecer. La fortuna, entonces, solo otorga bienes pasajeros que no son suficientes para aliviar las desgracias de los hombres: «A nadie le satisface del todo su fortuna».

Supersubmarina sufrió un gran revés aquel 14 de agosto. Estaban en su momento más alto y, después de ocho años de calvario, han comenzado a remontar el vuelo.

En una de sus entrevistas Supersubmarina afirman que la banda ya ha regresado. Después de años sin contacto alguno entre ellos, el periodista Fernando Navarro logró reunir una serie de entrevistas en un libro llamado Algo que sirva como luz. Ellos afirman que el solo hecho de volver a reunirse y recuperar su amistad es ya el regreso de la banda. No importa si algún día hay nuevo disco, tampoco sabemos si José logrará recuperarse y subir a un escenario de nuevo. Por encima de todo está la mistad de cuatro jóvenes de Baeza que comenzó hace mucho tiempo y que perdura por encima de la fortuna.

Esta es la gran victoria de Supersubmarina.

«Nada es desventurado, salvo que así lo pienses y, en cambio, toda suerte es buena si la sobrellevas con ecuanimidad» (Boecio).

Etiquetas

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

es_ESSpanish