Había una vez un pájaro llamado rocho, de cuerpo tan enorme como la montaña Taishan y alas como nubes que cubrían los cielos. Cuando se remontaba por los aires, se levantaba un ventarrón; y, en cada, abarcaba 90.000 li deslizándose sobre el vapor brumoso, bajo el cielo azulado.
Una vez iba volando hacia el Mar del Sur.
–¿Hacia dónde irá? –se preguntaba un paro riéndose–. Yo salto unos cuantos ren y luego bajo a divertirme entre los arbustos. Esto es más que suficiente para mí. ¿A dónde más querrá ir?
Aquí se puede ver la diferencia de punto de vista entre el grande y el pequeño.
Zhuang Zi
Cuento chino