No me gusta asistir a una sala de cine cuando acaba de estrenarse una película. Prefiero que pasen días o incluso semanas para poder escapar de las aglomeraciones y de los «devoradores» de palomitas.
Por eso acudí a la visión del biopic de Queen después de un mes de su estreno. Aunque no pude librarme del aroma de las palomitas, rápidamente me sumergí en la visión de esta gran película.
A pesar de que el guionista se ha tomado algunas licencias acerca de la vida de Freddie y su trayectoria con Queen, no importa demasiado.
El personaje central no podía ser otro que el propio Freddie. Es una historia de superación personal, de su relación de profunda amistad con el resto del grupo, y la búsqueda de una pareja que le quiera por lo que es como persona y no como estrella del rock. Destacar su relación de amistad-amor con su «love of my life», Mary Austin, que estuvo con él hasta su muerte.
La verdadera amistad o amistad filosófica estaría relacionada con el concepto de fraternidad, donde hay una necesidad de conocer a los demás y también existe el deseo de conocerse a uno mismo. Para que esa amistad sea fructífera, debe estar acompañada de respeto y mucha, mucha paciencia. Es la que nos mueve a ser solidarios, a acompañar y apoyar cuando hay problemas y dolores.
Mucho se ha hablado de lo que quiere expresar la canción. Freddie Mercury siempre fue reacio a explicar el verdadero significado. Tras lanzar el disco, en 1975, declaró:
«Pienso que la gente debería simplemente escucharla, pensar en ella y luego formar su propia opinión acerca de lo que les dice…».
Después de ver la película, pienso que el que habla en la canción es el Freddie filósofo. Es el que se da cuenta de que la vorágine de la vida de estrella de rock, asociada a los excesos de todo tipo, es una simple fantasía, no es la vida real. Por eso, tras superar esta etapa, intenta volver a los orígenes, supera sus egoísmos y piensa más en Queen que en sí mismo.
¿Es esto la vida real?
¿Es esto simplemente fantasía?
Parménides nos habla del mundo de las apariencias y nos dice que no es real. Solo el conocimiento de uno mismo permite escapar del Gran Engaño y entender mejor la vida.